Las Tunas, Establecida como la segunda provincia con menor tasa de incidencia del nuevo coronavirus en el país, Las Tunas desplegó una estrategia de control y prevención del SARS-CoV-2 que le permitió pasar a las fases de recuperación pos-COVID-19 con un saldo de 18 casos confirmados, de ellos 17 recuperados y solo un fallecido.
Al cumplimiento del cronograma nacional para evitar la propagación de la pandemia, esta provincia del oriente cubano decidió adelantarse a la adopción de medidas como el cierre de las fronteras, gestión que la Cruz Roja Cubana realizó con efectividad acompañada del Ministerio del Interior y la Empresa Provincial de Transporte que constantemente ajustó sus servicios.
El doctor Jesús Manuel León Silva, a cargo del equipo multidisciplinario que integran el Puesto de Dirección que da seguimiento a la COVID-19 en Las Tunas, informó a la Agencia Cubana de Noticias que hasta la fecha se han realizado seis mil 66 PCR en tiempo real y más de cinco mil 600 tiras rápidas en busca de la presencia del virus.
Además, desde que se puso en funcionamiento a mediados del mes de abril el sistema de pesquisa virtual ha auto registrado 12 mil 967 personas, según las más recientes cifras que desde este Puesto de Dirección se entregan al Consejo de Defensa Provincial, puntualizó.
León Silva, quien se desempeña como jefe del Departamento de Enfermedades Transmisibles del Centro Provincial de Higiene, explicó que de los 19 locales que funcionaron como centros de aislamiento en la provincia, actualmente se mantienen activos solo tres: la escuela pedagógica Rita Longa para el ingreso de contactos; el motel Los Laureles, en el municipio de Majibacoa, para sospechosos; y el Club Familiar para los viajeros internacionales.
Este último –agregó– tiene capacidad para 100 camas, de las cuales sólo están ocupadas 18 con colaboradores cubanos que regresaron de Venezuela y otros viajeros que llegaron a Cuba desde Italia, España y Estados Unidos.
El haber alistado el Hospital Guillermo Domínguez López, de Puerto Padre, para recibir a pacientes positivos a la COVID-19 y la preparación de los equipos integrales de trabajo en cada uno de los ocho municipios, posibilitó que se crearan las condiciones necesarias en caso de que se debilitara el sistema de salud.
En la primera línea del enfrentamiento al nuevo coronavirus estuvieron más de 760 profesionales de la salud, entre galenos, enfermeros y estomatólogos, así como técnicos y tecnólogos, personal de servicio y operarios, subrayó el directivo.
De igual forma en este tiempo fue decisiva la participación activa en las pesquisas de tres mil 75 estudiantes de las ciencias médicas, esfuerzo que hizo posible que se visitaran alrededor de 150 mil personas diariamente.
Más de dos meses sin casos confirmados validan la efectividad de dicha estrategia, aún así en Las Tunas no se baja la guardia, en las instituciones de salud continúan activos los protocolos para la atención a las afecciones respiratorias, y se enfrenta la fase tres de recuperación bajo el cumplimiento de las medidas establecidas.