El Doctor Francisco Durán en su habitual conferencia matutina de prensa informó hoy martes un paciente de Jobabo diagnosticado con COVID-19, sumando ya 801 casos en el presente calendario, 796 autóctonos, es decir, con fuente de infección dentro del territorio nacional y 5 importados.
La Licenciada en Higiene y Epidemiología en la localidad, Yanetcy Díaz Tejeda, informó que el nuevo caso es un paciente de sexo femenino, 27 años de edad, embarazada y reside en la comunidad rural de Sirven.
En control de los focos ha declarado hasta el momento a tres contactos estrechos que cumplen el protocolo establecido y uno de segundo orden con supervisión del médico de la familia.
Días Tejeda añadió que se mantienen 191 pacientes activos, treinta y tres del Pueblo, veintisiete de Los Solares, nueve Batey 2, uno Batey l, dieciséis de Argentina Sur, doce de Argentina Norte, nueve del Seis, veintinueve de Viet Nam, cuatro del reparto Azucarero, tres de Las Pelonas, uno de Las Tablas, once de Bracito, tres feijó, cuatro del 5, dos de Vega Nueva, once de San Antonio, seis de las 40, uno Margarita Terraplén, dos el 49, uno Limón Dulce, dos de Cayojo, tres del reparto Médico y uno de Sirven.
Además, existen 97 personas en observancia en centros de aislamientos, 69 en el politécnico Manifiesto de Montecristi del municipio y 28 en la escuela especial 13 de marzo, estos últimos, catalogados positivos de mediana complejidad, con una evolución estable de la enfermedad.
En el Hospital 14 de junio se asisten a 59 pacientes, 28 en la sala B, para casos confirmados de alta complejidad, 28 en la sala A, sospechosos y 3 en terapia intensiva.
La especialista exige el estricto cumplimiento de las medidas higiénico sanitarias, el uso del nasobuco y el distanciamiento físico, aparejado a la disciplina, la autorresponsabilidad individual y colectiva por el bienestar de todos.
Llaman a los jobabenses adoptar actitudes responsables en las circunstancias actuales por la salud de todos.
Las Tunas.- Ante el cada vez más creciente aumento de menores de 19 años positivos a la Covid-19, el Hotel Las Tunas se alista para funcionar como hospital infantil, informaron autoridades de Salud Pública en la provincia.
Hoy los dos hospitales pediátricos, el del municipio cabecera y el Raymundo Castro, de Puerto Padre, ven agotadas sus capacidades y como ha sucedido en otras provincias es necesario preparar otras instituciones con ese fin. El Ministerio de Turismo accedió en poner a disposición la mayor instalación de la cadena Isla azul en la provincia.
Así informó Viviana Gutiérrez, directora provincial de Salud, quien añadió que ya en la jornada de este domingo llegaron varios insumos médicos enviados por el Ministerio de Salud Pública para comenzar a crear condiciones en esta y otras instituciones sanitarias.
En los hospitales de la provincia hoy existen 813 camas solo para la atención a pacientes Covid-19 y esta cifra debe crecer en unas 488 más para llegar a casi mil 300, de igual manera aumentará a 91 las capacidades en las terapias, que hoy es de solo 64.
Por otro lado, deben sumar unas 421 camas en los centros de aislamiento de los ocho municipios para llegar a más de cinco mil 200, capacidad que permitiría afrontar el alza de confirmados.
La provincia se prepara para una tasa de 2000 enfermos por cada 100 mil habitantes, cifra que ya prácticamente alcanza el municipio cabecera donde las camas en centros de aislamiento deben aumentar en unas 902 más para superar las dos mil 500.
Para asumir la atención de enfermos con Covid-19 son necesarios no solo recursos materiales, sino humanos, tanto personal sanitario como de servicios, para esto último se crean brigadas por la Central de Trabajadores de Cuba y la Unión de Jóvenes Comunistas para rotar por los centros de aislamiento.
A los actuales médicos y enfermeros se suman estudiantes de las carreras de Medicina y la propia enfermería de los últimos años, se siguen reordenando los servicios y se ubican los residentes en los centros de atención a pacientes de alto riesgo.
Al cierre de este lunes, Cuba reportó 6 342 nuevos casos de COVID-19 y 84 fallecidos, informó este martes en su comparecencia diaria el doctor Francisco Durán García, director nacional de Epidemiología del Ministerio de Salud Pública (Minsap).
Cuba amaneció con 96 653 ingresados: 56 8853 sospechosos, 4 312 en vigilancia y 35 488 confirmados (casos activos), 1368 menos que los reportados en la jornada anterior.
Para la COVID-19 se realizaron un total de 43 834 muestras para la vigilancia en el día resultando 6 342 positivas. El país acumula 7 935 443 muestras realizadas.
La porcicultura jobabense ha reducido su impacto en el quehacer socio productivo local, es innegable que la dependencia de los piensos importados y la introducción de convenios porcinos desde principios del 2000 han afectado la tradicional manera de la crianza de cerdos criollos. Aunque no hay estudios locales confirmados sí se nota un reflejo negativo en las comunidades, pues la mayoría de los tenedores de animales no tienen la intensidad de antes.
«Es verdad que antes uno soltaba dos o tres marranas en un pedazo cercado y se hacían puercas paridoras solas, luego esos animalitos iban al potrero, hozaban, comían de todo, hierbas, semillas, principalmente la palmicha, pero nos descuidamos y ya muy pocos tenemos ese estilo» dice Evelio Bermúdez.
Y ciertamente era difícil llegar a una finca y no toparse un lote de marranitos en escalera de edades bordeando una palma real, sin embargo, ya no solo cerdos, ni palmas reales se ven prácticamente en los potreros.
La gente fue yendo a las cochiqueras, fomentándolas a mediana y gran escala hasta llegar a convertirse en monoproductores en la mayoría de los casos, y si bien eso representa una ventaja por un lado, por otro, viene este impacto cuando no hay una base alimentaria que sostenga el programa.
«Yo puede lograr que más de la mitad del alimento animal que consumía mi cochiquera se produjera en mis tierras. A base de sorgo, maíz, yogurt de yuca… una combinación amplia, pero para reforzar sí se necesita el pienso industrial» explicó Rafael Arpajón, uno de los mayores porcicultores locales.
Precisamente a partir de la experiencia de Rafael Arpajón en su propia cooperativa se han planteado iniciativas que vayan a suplir esa carencia que hoy se presenta con la producción porcina. Algo que desde 2019 viene proponiendo Gonzalo Leyva, presidente de la Cooperativa de Créditos y Servicios Osvaldo Figueredo es que agricultores que no tiene convenios porcinos produzcan parte de los alimentos para los animales de los que sí tiene cochiqueras de grandes dimensiones.
Esto más o menos ha funcionado ahí, tal vez lo que requiera es de mayor planeamiento, aseguraron en una de las reuniones de la organización de base de la Asociación Nacional de Agricultores Pequeños, pero sí ha surtido efecto, practican una especie de articulación productiva.
La cooperativa de créditos y servicios Osvaldo Figueredo de Jobabo es la que mejor ha implementado la producción porcina a partir de una forma muy peculiar de alternar el alimento que suministra la entidad comercializadora y lo que sus campesinos pueden aportar para sustituir importaciones. Rafael Arpajón es reconocido como uno de los mayores emprendedores en la porcicultura local con experiencia de más de una década buscando soluciones para fomentar sus cochiqueras.
¿Qué otros problemas golpean tanto la porcicultura?
«Digamos que no es un problema de iniciativas, sino de recursos para empezar, porque algunos tendríamos que empezar de cero, y es la disponibilidad de reproductoras» explica uno de los asociados de la CCS Jorge Aliaga, unidad con amplio potencial ganadero.
Si vemos el problema desde todas las aristas aparecen otras causales, y es el propio interés de las juntas directivas de incidir un poco más en la gestión productiva y el impulso de proyectos que beneficien por lo menos en eso: las reproductoras de cerdos.
«Con el cerdo sucede algo, se han perdido los ejemplares de raza criolla, que es más resistente y menos propensos a las enfermedades. Además que come cualquier cosa. No me imagino un puerco blanco metido en un charco hozando las lombrices, siempre me han dicho que se debilita» manifiesta un campesino de Palo Seco.
Ciertamente está el mayor problema en la alimentación, pero la salud de los animales ha sido un contragolpe en estos últimos tiempos en que no abundan los medicamentos suministrados por las farmacias veterinarias.
Luis Manuel Góngora era productor porcino, y ante la inestabilidad en el suministro de piensos, tuvo que buscar una alternativa que respaldara sus no pocas inversiones puestas en la finca.
«Tuve que dejar los convenios porcinos a un lado y dedicarme al tabaco. Los cerdos sin comida no dan el rendimiento que se exige por los convenios, demoran mucho y eso es pérdida de recursos, y por otra parte, no aparece nada para tratar las enfermedades, no hay medicamentos para desparasitar, no hay vacunas para el tétano, no funciona así» asegura.
Ta vez uno de los pocos que sigue apostando por la porcicultura a gran escala es Alexander Ortiz Labrada, el mayor productor de su tipo en el municipio Jobabo, quien se las vale a pulso limpio para mantener una cochiquera enorme con más de 500 animales todo el tiempo.
Fomentar ambos tipos de crianza fuera lo ideal, pero para ello se requiere de una proyección más aguda con el propósito alimentario, y por otro lado buscar alternativas para dotar a los campesinos de pies de cría de especies no importadas.
Alternativas a la vista
Lo más cercano a un programa local enfocado en este propósito de fomentar la porcicultura es la reciente iniciativa promovida por autoridades locales y la Unidad Empresarial de base Porcina de Jobabo de crear módulos porcinos, ya con una finca dedicada al cruzamiento de especies blancas y de capa oscura para sacar híbridos más resistentes y de buen porte.
«Esto ya es una realidad, ahí está el proyecto dando sus primeros pasos» aseguró Julio Villa Verdecia en pleno campo mientras hacían un recorrido con directivos del sector agropecuario y dirigentes locales para ajustar el engranaje de un futuro proyecto de desarrollo local y ponerle financiamientos.
centro de reproducción en El 48
Esta unidad se encargaría de generar los pies de crías necesarios para el fomento de casi una decena de módulos de reproducción repartidos en la mayoría de las unidades productivas, especialmente en las UBPC, y además de asegurar las cerdas para continuar la crianza, aportar en un plazo corto carne para la venta a la población.
Tal propósito, no difícil de lograr y que ha sido desde hace dos meses uno de los proyectos en constantes seguimientos por las autoridades locales, vendría a devolver no solo la carne a los mercados, sino a rescatar una tradición casi perdida.
Jobabo.- Una buena parte de jóvenes jobabenses egresados de Ciencias Médicas recibieron oficialmente su Título de Doctores en Medicina y Licenciados en Enfermería en un sencillo pero necesario acto de graduación, en el cual se les reconoció su desempeño desde hace varias semanas en el enfrentamiento a la COVID-19.
En total se gradúan 30 médicos(as) y 3 enfermeros(as), los cuales ya se incorporaron a los principales servicios asistenciales de la salud para reforzar el quehacer sanitario y aun siendo estudiantes participaron en actividades como la vacunación al personal de salud, diagnóstico de pacientes, pesquisas y organización de las consultas.
La solemnidad del Juramento Hipocrático fue, además del recibiendo de sus títulos, el principal momento de la graduación, algo que como expresó Jitsy Molina, una de las recién graduadas, es un precepto ético que se lleva en el corazón y en cada actuar de quienes escogen esta profesión.
En el acto no pudieron estar todos los egresados porque precisamente una parte de ellos estaba de guardia en los servicios asistenciales y otros salían de un turno de 24 horas.