Parece que los ejemplos de la Integral Agropecuaria, descapitalizada luego de ser absorbida por una empresa provincial, despojada de recursos materiales y financieros, y devuelta al municipio con una deuda de más de 40 millones de pesos no es suficiente para defender a diente limpio desde aquí que lejos de convertir la Unidad Empresarial de Base (UEB) Agroforestal en un colectivo subordinado a una UEB del municipio Las Tunas se transformara en una forma empresarial (de las tantas posibilidades que hay) subordinada a los intereses de Jobabo, que es donde radica.
«Desaparece como UEB (Unidad Empresarial de Base) y pasa a ser un colectivo laboral solo dedicado a la extracción de madera y otras actividades como el suministro de leña a organismos priorizados» expone Misael Cedeño, director saliente de la ya casi extinta entidad especializada en la silvicultura que hasta hace par de meses parecía tener una transformación a mediano plazo con los beneficios que trae a este territorio el Proyecto IRES, un ambicioso programa de reforestación que abarca Jobabo y los otros dos municipios del sur de Las Tunas.
Ese bajón de rango a la Agroforestal supuestamente se debe al debilitamiento de la estructura de dirección, la caída constante de los resultados económicos teniendo que jalar de los fondos de la Empresa Provincial, y la disminución progresiva del capital humano. Al menos esa es la versión oficial que ofrece Osmel Fernández Cruz, director de la Empresa Agroforestal Las Tunas.
«Se procedió a crear este colectivo laboral por qué razón, porque esa UEB durante el periodo del año pasado y lo que va de año viene con pérdidas bastante fuertes que inciden negativamente en los resultados económicos de la empresa» reseña Fernández Cruz.
Bajo la aspiración de regresar en algún momento al estatus empresarial, el intendente del Consejo de la Administración Municipal (CAM) en Jobabo, Luis Andrés Sosa Quezada, confirmó que este asunto se venía tratando desde hace un tiempo y argumenta que una vez convertido en colectivo laboral se debe ir fortaleciendo para en algún momento pueda volver a ser Unidad Empresarial de Base.
Lo alarmante es que ese visto bueno unipersonal del Intendente, lo cual se pudo comprobar no fue colegiado en el CAM ni en la Asamblea Municipal del Poder Popular, y que además se saltó al menos la opinión especializada de los funcionarios de la Delegación Municipal de la Agricultura, va en contra de los propios intereses del municipio y su Estrategia de Desarrollo basada en la reorganización de las estructuras de gestión empresarial.
«La Agroforestal estaba previsto a mantenerse como una UEB, es lo que propusimos en el programa de la autonomía del municipio» corrobora Sosa Quezada.
«Conocí de este cambio ahora cuando entré de vacaciones, pero no se me consultó para hacerlo. Nosotros lo que pedimos a la empresa era un cambio en la dirección de la UEB no este tipo de cambio que hicieron» confirma Serguey Zayas Saborit, delegado de la Agricultura en Jobabo.
Hoja de ruta desviada
Convertir la Forestal en colectivo laboral a una entidad del municipio La Tunas se debe a una falta de respaldo desde la administración de gobierno en Jobabo a propuestas más favorables, porque desde el año pasado conociendo los problemas que afronta la entidad existieron no pocas propuestas de convertirla en una mediana o pequeña empresa estatal, incluso hace aproximadamente tres meses esta fue la propuesta que Misael Cedeño trató de gestionar, pero no tuvo ni respuesta ni sintió el respaldo que requería tal proyecto favorable a los intereses de la economía local.
«Le llegué a pasar un documento al Intendente para que en vez de hacer un colectivo laboral se hiciera una Mipyme, una pequeña empresa estatal. El intendente me hizo cambiar algunas cosas porque no estaba de acuerdo con lo que había puesto. Se lo cambié otra vez y me lo firmó, y se lo envié por Whatssap al director. No hicieron nada, no sé lo que ellos hablaron…» expone.
En la última Plenaria de la Economía, al analizar la gestión municipal sobre las propuestas de cambios en las estructuras empresariales y la posibilidad de convertir entidades estatales a pequeñas y medianas empresas, solo se llevó a debate la situación de Granja Urbana, una de las dependencias de la Agricultura, mientras que el caso de la Agroforestal se le dio de lado cuestionando la inestabilidad productiva y el pago de salarios sin respaldo productivo.
Y es que, si bien la situación económica de la forestal en Jobabo es compleja, hay algunos detalles que indican que sus ataduras a la entidad provincial no le favorecían, más bien catapultaban los intereses de Jobabo y de los propios trabajadores. Un asunto tan delicado como las normas, con reiteradas quejas, nunca se ajustaron en correspondencia con las condiciones laborales y el complejo entorno de las tareas que se realizan aquí, ni se aportaban los recursos necesarios para acometer el objeto social de la Forestal.
«Cuando el ordenamiento, sí, nos subieron el salario básico pero lo primero que hicieron fue subir la norma. Alguien que sepa de normas o simplemente haya trabajado en esto sabe a simple vista que es imposible que una jornada laboral un solo hombre pueda cortar 9 metros cúbicos de madera en medio del marabú, cargarlos a una carreta y desmontarlo luego» dice indignado uno de los obreros.
Es que el año pasado el colectivo de la dirección de la UEB fue al campo para demostrar que eran incumplibles las tareas de jornada impuestas desde la provincia, y entre seis hombres no pudieron cortar la cantidad del marabú que se entretejía en la larga trocha que exigen a un solo hombre en ocho horas.
Desarticulación de infraestructuras sin tener en cuenta los intereses del municipio
Más allá de las normas viene la mutilación poco a poco de infraestructuras. Primero se arrendó a un privado la instalación de beneficio del carbón para exportar que operaba la UEB y generaba buenos ingresos para equilibrar la gestión silvícola, luego, hace unos dos mses les anunciaron que el aserrío situado en el asentamiento de El Níspero, también sería arrendado a una persona natural.
«¿Cómo es posible que, si no nos dan diésel para hacer funcionar el aserrío, lo pueda hacer un particular?» se pregunta el director saliente de la UEB, quien cuestiona que se quiten estos recursos e infraestructuras al Estado para ponerlas en manos de particulares, sabiendo que el combustible, que no es tanto, puede gestionarse para que lo siga operando La Forestal de Jobabo.
«…pero eso no es todo. No sé el tipo de negocio que exista entre la persona que opera la beneficiadora de carbón con la empresa. El mes pasado no pudimos recoger carbón en el campo porque los sacos que teníamos en el almacén el director provincial mandó a dárselos a esa persona. Eran 2000 sacos que, nosotros rotándolos, podríamos seguir recogiendo y cumplir con el acopio ahora en septiembre» declara Misael.
Lo alarmante de estas decisiones es que desde enero hasta julio la producción de carbón venía subiendo considerablemente pero todo cambió.
¿Cómo va a tener resultados una entidad con tantas trabas impuestas? ¿Cómo los trabajadores de la Forestal no van a migrar a otros sectores con mejor remuneración si con las normas que les ponen, ganarse el salario básico es imposible?
«Como UEB más o menos podíamos hacer algo. Pero una brigadas no, sino cambian el pago por resultado todos se van a ir de aquí. El problema es el salario que el obrero no gana, y no se ha venido a ver esa situación. El trabajador aquí si le gusta trabajar, aquí teníamos tres carretas de trabajadores, pero todos se han ido. Yo no quisiera irme porque llevo 12 años aquí y me gusta el trabajo, pero por lo que veo…» expone Reinier Cedeño Ramos.
Que la Forestal de Jobabo haya caído tanto viene por disímiles causas, desde problemas administrativos y falta de recursos e insumos, hasta esa cantidad de incongruentes zancadillas que tampoco fueron corregidas desde aquí (por los decisores municipales) a pesar de tantas alertas y quejas de los propios trabajadores. Desintegrarla, por resultados incómodos sólo sería camuflar las responsabilidades de los que proponen y validan tal medida.
¿Qué afectaciones puede traer desintegrar la UEB Agroforestal Jobabo?
«Yo pienso que es una mala decisión tomada desde la provincia, porque realmente en vez de ayudar lo que están es destruyendo el municipio, no solo la UEB. Mira las cosas de aquí van unas para Amancio, otras para Las Tunas, ¿qué va a ser esto? Un brigadita que lo que van es a usarla como una marioneta para alimentarse ellos de lo que produzcan aquí» dice Elier Peña.
Ismani Zamora Santos, conocedor al detalle de las potencialidades de Jobabo para la actividad forestal esperaba otra acción, no una bajada de categoría «Lo ideal es que hubiesen dado autonomía, las cuentas para operar y poder buscar recursos para los obreros sin estar dependiendo de Tunas. Al tener nosotros la autoridad hubiésemos hecho un estudio de normas y en poco tiempo veríamos un cambio en la producción, los trabajadores que se fueron volverían».
«Yo pensé en un principio que lo que iban a hacer era una empresa con la UEB Agroforestal. Que ahora mismo nos dejaron técnicamente improductivos, porque nada más es extractivo, y la silvicultura ¿Quién la va a hacer? ¿Va a venir una gente de Colombia a aquí a hacer silvicultura? Digo yo que esa no era la solución»
Y hablando de silvicultura ¿Cómo van a dejar sólo una brigada para extraer madera si la primera regla que impone el Servicio Estatal Forestal es plantar árboles para poder talar? Al menos esto lo ha dejado claro aquí decenas de veces el especialista de esta institución Ramón Ramos Ramos.
Jobabo solo tiene un índice de boscosidad de poco más de un 18 %, y aunque es el cuarto en la provincia según los datos oficiales, aún son cifras que no llegan a la media nacional que es de alrededor de un 23%, además que el crecimiento anual no supera siquiera el uno por ciento.s
Hay muchas incongruencias en la desintegración de la UEB Agroforestal de Jobabo, y precisamente una de ellas es esa: ¿Les permitirán talar sin plantar bosques?
Lo ideal hubiese sido que algún órgano consultivo del gobierno local evaluara el asunto con más rigor y no solo el visto bueno unipersonal del Intendente ante la propuesta de los provinciales, decisión que los juristas consultados, definen como ilegal.
Política y económicamente no hubo defensa desde las instituciones locales de los intereses de desarrollo de este municipio. Otra vez Jobabo queda mutilado en el sector agropecuario en favor de instancias provinciales que lejos de ayudar deterioran más las infraestructuras empresariales de este rincón del sur de Las Tunas. Cada vez que se disuelven formas empresariales o cambian de categoría a una inferior se reducen más las posibilidades de que mejore económicamente, y con esos cambios también se van fuera de aquí decenas de recursos, maquinarias, ingresos fiscales y aspiraciones de la gente del pueblo de levantar economicamente el territorio. Una vez perdidos, son prácticamente imposible de recuperar.
En audio:
Me gustaría que reflejaran luego el desenlace del análisis a ver si hacen algo por jobbao y no destruyen la forestal como lo poco que queda
Todo se lo estan dando a los particulares y dicen que no vamos al capitalismo
Buen tema, mis respetos al fin alguien que denuncia el mal trabajo de un dirigente q en ves de servir a su pueblo se arrodilla a los sarpasos de otro municipio
Si los dejan talar sin resembrar muy mal que van a ir con un municipio que se lo come wl marabú. Veremos si alguien con seso hace algo
Me duele mi municipio y aunque estoy lejos siento rabia por tanta destrucción. Que alguien haga algo pronto o seremos una aldea india
Ninguna empresa deben dejarla a los provincialee se lo llevna todo y machacan los municipales así pasa en todo el país
Mi hijo se fue de ese trabajo en 2022 por lo mal que pagan. Todo lo que hacia la ueb lo alaba Tunas y para ellos sí buenos salarios.