Dicen que al nacer, algo invisible comienza a unir personas, una suerte de guía que las ayuda a encontrarse años más tarde, un lazo irrompible con el amor de sus vidas. Es la creencia del hilo rojo, el del destino y las almas gemelas.
Hay quienes han tenido la dicha de encontrarse y amarse toda una vida, compartir cada instante de felicidad con quien están conectados.
Sea irrompible o no, sea falso o cierto, la leyenda del hilo rojo ha romantizado todavía más el buen amor, sano y verdadero, y ha permitido confiar y creer en el destino y sus mágicos designios.
Luzmarda Arrieta y Alcides Gómez Rodríguez, han compartido más de medio siglo de alegrías, tristezas, respeto y mucho, mucho amor. Sea culpa del destino o de una linda casualidad, esta pareja demuestra que el querer solo necesita pequeños detalles.
Dicen que no hay parejas felices, sino personas felices que hacen pareja. Ellos bien pueden ser ambas cosas, tras tantos años de inacabable amor, y cuando permanecer juntos incluso más allá de la vida, es un deseo de fervientes emociones.
Luzmarda y Alcides nos demuestran que sí existe, que un amor verdadero y firme se construye al paso y que todo es cuestión de querer. El sentimiento más lindo y poético hace la vida hermosa, más aún cuando se ama y se es amado.