La Habana, 24 oct (ACN) Con dos actos centrales en las empresas Pedro Soto Alba de Moa (Holguín) y de laboratorios José Isaac del Corral en esta capital, trabajadores de las ramas de la geología y la minería celebrarán hoy su día.
Dirigentes del Sindicato Nacional de Trabajadores de Energía y Minas (SNTEM) y de los grupos empresariales Geominsal y Cubaníquel explicaron que con estas conmemoraciones culminarán las jornadas de actividades iniciadas el pasado 5 de octubre en saludo a la fecha.
George Batista Pérez, secretario general del SNTEM, resaltó que la ocasión constituye una gran oportunidad para enaltecer el quehacer cotidiano de los más de 23 mil afiliados del sector y su compromiso con el pueblo.
Entre las acciones propuestas se incluyeron los intercambios con colectivos y trabajadores destacados, con los movimientos de innovadores y racionalizadores de grandes aportaciones en sus respectivos puestos laborales y la entrega de reconocimientos al personal con larga trayectoria en el área; entre ellos, las distinciones René Ramos Latour, agregó.
Batista Pérez aseguró que a estas iniciativas se han sumado los esfuerzos de los obreros incorporados a las tareas de recuperación en las zonas afectadas tras el paso del huracán IAN por el occidente cubano.
La celebración tiene su origen el 24 de octubre de 1960, fecha en la cual pasaron a manos del naciente Gobierno Revolucionario las empresas mineras existentes, que hasta ese entonces eran propiedad de compañías norteamericanas y que se negaron a evaluar las posibilidades de indemnización.
El SNTEM tiene como su mártir a René Ramos Latour, quien trabajó como contable para la Nicaro Nickel Processing Company, dedicada a la producción de níquel en municipio holguinero de Mayarí, antes de involucrarse en actividades revolucionarias a través del Movimiento 26 de Julio.
A la muerte de Frank País (1934-1957), acribillado a balazos por agentes de la policía, Ramos Latour lo sustituyó en el cargo de Jefe de Acción y Sabotaje de la organización en Santiago de Cuba hasta que la persecución de fuerzas de la tiranía lo obligó a incorporarse a la lucha en la Sierra Maestra.
En esa etapa alcanzó el grado de Comandante del Ejército Rebelde y cayó en un combate en la finca El Jobal, el 30 de Julio de 1958.