Jobabo.- El mosquito Aedes Aegypti, transmisor del dengue, Zika, chicungunya y la fiebre amarrilla pudiera convertirse en una amenaza para los jobabenses en estos meses de intenso calor y lluvia, al estar dispersos en varias comunidades.
Aunque su índice de infestación está por debajo de lo permisible, durante el mes de junio se detectaron solo tres focos del vector y en lo transcurrido del presente año van 22.
La mayoría han sido descubiertos en tanques bajos donde se almacena agua para el uso doméstico; como consecuencia de la presencia aunque mínima del vector, la situación epidemiológica se torna estable.
Aunque la posibilidad de un incremento existe al estar creadas todas las condiciones climatológicas, por tales motivos no se puede bajar la guardia, se requiere que los pobladores revisen sus depósitos para almacenar agua, sus patios y entorno, y eliminen todo aquello que sea favorable para la proliferación de los mosquitos.
En conversación con directivos del departamento de lucha antivectorial del municipio refirieron a la prensa que la capacidad de adaptación y resistencia del mosquito es elevada, y depositar los huevos en cualquier lugar húmedo complejiza cualquier actuar contra su reproducción. Instamos a todos a eliminar focos en viviendas, centros de trabajo y en la comunidad en general, para ganar la batalla.
Los especialistas añadieron que cada ciudadano comprenda la necesidad de contribuir entre todos al bienestar individual y colectivo sobre todo en las circunstancias actuales de la COVID-19, la percepción de riesgo que cada cual tenga será el principal aliado que necesitamos.
En estos meses de intenso calor y lluvia El mosquito Aedes Aegypti pudiera convertirse en una amenaza para los jobabenses, al estar dispersos en varias comunidades.