Andar entre los esteros a fuerza de remo, es un privilegio para Enrique Vázquez, uno de esos trabajadores de Monte Cabaniguán que garantiza que funcione correctamente el monitoreo de los ecosistemas en el área protegida jobabense.
Kiki, como le apodan la mayoría de los que le conocen, lleva 15 años lidiando con los manglares, los cocodrilos, desandando los esteros, ahí, tiene recreado parte de su mundo entre el resto de quienes son apodados como todólogos por la diversidad de tareas que hacen en función del medio ambiente.