Aníbal Castillo Machado, trabajador con destacada trayectoria laboral que dedicó gran parte de su vida a la industria azucarera en Jobabo, Santa Cruz del Sur, Majibacoa, Menéndez, Amancio Rodríguez y en la República bolivariana de Venezuela.
En la elección por el sector mucho tuvo que ver su padre, Wualfrido Castillo, quien ante una interrogante de su hijo le respondió ´´ Profesor vas hacer toda una vida, pero en la industria azucarera puedes lograr muchas cosas en el ámbito profesional.´´ fue así que Anibal decide iniciar un largo y fructífero camino dentro del sector más importante en Cuba, en esa etapa.
En 1964, se presenta en el CAI Perú municipio de Jobabo, para iniciarse en un puesto donde poseía toda la teoría sin embargo precisaba de conocimientos prácticos en dibujo técnico y en específico todo lo concerniente al trazo de los molinos para los que se construían las cuchillas de los mismos. Con entereza, sentido de responsabilidad e interés, logra dominar estas tareas y fungir como técnico y auxiliar de Jefe de Maquinaria.
En etapas posteriores llega a convertirse en un trabajador multifacético al accionar en todas las áreas del central, dado el vasto conocimiento que fue adquiriendo de las diferentes especialidades en la industria. Al transcurrir de los años, se le confía cursar estudios en la república de Checoslovaquia lo que repercutió de manera positiva en el montaje de técnicas modernas en el CAI Perú.
Un suceso de gran importancia en su vida laboral, fue sin dudas el intercambio realizado con el máximo Líder de la revolución cubana Comandante en Jefe Fidel Castro Ruz, con motivo de su visita al municipio de Jobabo, por el sobre cumplimiento del plan de producción de azúcar y de otros indicadores.
Gracias Anibal Castillo Machado, por ubicarse en un lugar especial en la industria azucarera cubana y en específico en el insigne Central Agroindustrial Perú, motivo de orgullo no solo de los hombres y mujeres que laboraron en esta industria, sino del pueblo de Jobabo, municipio al sur de Las Tunas.