Sancti Spíritus, 16 may (ACN) Las entidades del Ministerio de la Industria Alimentaria (MINAL) pueden producir más alimentos con los recursos y materias primas que disponen, aseguró en esta ciudad Manuel Santiago Sobrino Martínez, ministro de esa rama en Cuba.
El titular del sector asistió este sábado al Consejo de Cooperación del MINAL en la provincia de Sancti Spíritus, donde departió con directivos de ese organismo en el territorio espirituano.
Sobrino Martínez chequeó los acuerdos adoptados en su anterior visita a Sancti Spíritus, en la que los directivos se comprometieron a “ir por más” en sus respectivas producciones, sin embargo en la mayoría de los casos hubo incumplimientos.
Así por ejemplo la Empresa de Productos Lácteos Río Zaza logró en el primer cuatrimestre del presente año solo el 79,7 por ciento de su plan en unidades físicas y, el 83 por ciento en relación con igual período de 2020, mientras que la entidad cárnica, aunque cumplió su programa en esta etapa al 103,7 por ciento, apenas llegó al 57 por ciento en comparación con idéntica etapa del año precedente.
El ministro aseguró que la Empresa Cárnica espirituana se está convirtiendo en un referente a nivel nacional, sin embargo debe incrementar su eficiencia.
Al tratar la calidad del pan de la canasta básica familiar, Sobrino Martínez expresó que aún es un problema no resuelto, y afirmó que existe conocimiento y que los tecnólogos saben cómo mejorar este producto tan demandado por la población.
Ante las dificultades detectadas, el Ministro insistió en descubrir nuevas maneras de hacer dentro de los términos y procedimientos legales establecidos en el país, por tal razón apeló a la búsqueda de alternativas y de iniciativas creadoras, porque es un imperativo, acentuó, producir más alimentos; y Sancti Spíritus, reiteró, tiene que enfrentar ese reto.
Las ventas de productos alimenticios en las tiendas que expenden sus mercancías en moneda libremente convertible constituye una necesidad en las actuales condiciones económicas que atraviesa Cuba, manifestó el titular del ramo.
Esas ventas, refirió, ayudan a la sustitución de importaciones, al desarrollo de la industria alimentaria y a que el Estado no tenga que erogar divisas que pudiera emplear en otros sectores como la salud pública, además de que es una forma de cubrir los gastos y por ende obtener autofinanciamiento en la gestión económica.
También Sobrino Martínez hizo hincapié en el encadenamiento productivo, y en ese sentido ilustró la labor de la Empresa de Conserva de Vegetales espirituana, la cual puede procesar el mango que recibe de la base productora para obtener pulpa, y destinar parte de esta a minindustrias del MINAL para hacer batidos, refrescos y jugos.
Sin negar lo que se ha hecho, estamos obligados, expresó finalmente, a revertir la situación actual de nuestras empresas para garantizar la alimentación del pueblo, porque ese es nuestro compromiso y deber moral.