Al ser áreas muy frecuentadas por la población, las unidades comerciales y gastronómicas se convierten en espacios proclives a la transmisión de la COVID-19, especialmente si no se adoptan las medidas de contención orientadas por el Sistema de Salud.
Ante los riesgos, aun cuando en Jobabo, los cuatro casos registrados han sido importados y no hay transmisión local, es necesario ser mucho más rigurosos en el acceso a estos establecimientos y en la forma en que se gestiona todo el proceso comercial.
¿Se garantiza a plenitud la prevención? ¿Qué falta por hacer?