Naciones Unidas, 26 ago (Prensa Latina) La ONU lanzó un llamado humanitario de 187,3 millones de dólares para proporcionar ayuda vital a más de 800 mil personas en Haití, que están hoy afectadas por el reciente terremoto.
Según indicó la Oficina de Naciones Unidas para la Coordinación de Asuntos Humanitarios (OCHA), los recursos que se consigan de los donantes internacionales se destinarán a la población más vulnerable tras el desastre.
Más de la mitad del dinero solicitado, unos 120 millones de dólares, se distribuirá en tres áreas fundamentales: seguridad alimentaria, educación y refugio, detalló esa entidad.
Las necesidades humanitarias en la nación caribeña aumentaron rápidamente tras el terremoto de 7,2 grados que sacudió el suroeste de Haití el pasado 14 de agosto, el cual causó daños en los departamentos de Grand’Anse, Nippes y Sud, indicó la OCHA.
A este ya complejo panorama se sumó el paso de la tormenta tropical Grace, que causó inundaciones en las zonas afectadas por el sismo.
Incluso antes de estos dramáticos eventos, precisó la OCHA, en esa zona vivían 610 mil personas con necesidades humanitarias urgentes y más de la mitad de ellas ya sufrían carencias extremas.
De acuerdo con datos oficiales del Gobierno haitiano, el sismo del 14 de agosto causó más de dos mil 200 víctimas mortales, 12 mil 268 heridos y unas 650 mil familias precisan ahora asistencia cuanto antes.
Además, la grave situación de salud genera preocupación, pues varios hospitales resultaron dañados o destruidos, mientras los que todavía funcionan están completamente desbordados y carecen de personal y suministros médicos suficientes.
El Consejo de Estado, mediante el Decreto-Ley 41, dispuso la creación del Instituto de Información y Comunicación Social (IICS), que tiene la misión de conducir y controlar la Política de la Comunicación Social del Estado y el Gobierno. Para conocer sobre la importancia y los objetivos del nuevo órgano, comparecieron este miércoles en la Mesa Redonda directivos de este sector.
Como una excelente noticia, tanto para los profesionales de la comunicación y la población valoró la creación del IICS, Humberto Juan Fabián Suárez, vicepresidente de la Asociación Cubana de Comunicadores Sociales (ACCS) al inicia el programa radio-televisivo.
En su intervención recordó que la comunicación es uno de los tres pilares básicos de la gestión gubernamental del país, y al otorgársele rango de ministerio a este nuevo organismo, constituye un cambio cultural.
“También tiene un impacto en los espacios físicos y virtuales. Igualmente contribuye a legitimar el campo de la comunicación social en el país y el trabajo de sus profesionales”.
Advirtió que las relaciones públicas, la propaganda, la comunicación institucional y las investigaciones en este campo del saber no siempre han sido bien comprendidas, entre tanto se entiende comunicación al periodismo.
Añadió que el nuevo organismo debe ser un facilitador, un conductor de la gestión comunicativa para favorecer el diálogo y el consenso de la sociedad cubana, “para garantizar la participación de los ciudadanos en las complejas tareas que demande la sociedad”.
A su juicio, en un país como Cuba que precisa una “más amplia cultura comunicacional”, la creación del Instituto y la aprobación de sus normas complementarias, no son sinónimos de soluciones inmediatas a los problemas de comunicación que persisten en la nación, “es un proceso que será largo pero que el Instituto va a dinamizar y que las normas van a ayudar a enmarcar en determinadas pautas legales”.
Según se informó, la gestación del IICS llega tras nueve años de profundo debate e intensa investigación científica, en los que se decidieron principios, funciones y normas que pautan la política de comunicación del estado y del gobierno cubano.
“El grupo de trabajo para la creación del organismo no solo se ciñó a los profesionales de la comunicación, sino que tuvo a miembros de la UPEC, las ACCS, FCOM y especialistas de la radio, la televisión y el Minrex. Igualmente participó el Ministerio de Trabajo y Seguridad Social, Finanzas y Precios, y de la Comisión de Implementación y el Partido”.
De esta manera, se revisaron todos los planteamientos vertidos durante los más recientes congresos de la UPEC y la AHS. Igualmente se examinaron 82 tesis de licenciatura, maestría y doctorado, a la vez que se hizo un amplio estudio de derecho comprado en materia comunicacional.
Igualmente se tuvo en cuenta toda todas las normas jurídicas que existían en Cuba y se visitaron cinco provincias para intercambiar con profesionales del sector.
“Luego de concluir la primera versión del documento se realizó un amplio proceso de consulta con los órganos del poder popular, OACES, UPEC, la UNEAC, etc… y se presentó a sus Comité Nacionales. También se consultaron a más de 400 personas entre ellos, intelectuales, políticos de los cuales se recogieron más de 900 opiniones. De ellos 528 ratificaron totalmente la política y se realizaron 392 recomendaciones: 117 fueron aceptadas”.
El directivo dijo además que en el 2018 este texto fue publicado en los principales sitios webs que tienen que ver con esta materia y reiteró que su aprobación definitiva estaba incluida en el cronograma legislativo aprobado por la Asamblea Nacional. “No fue nada apresurado”.
El IICS robustece la institucionalidad de la nación
Por su parte, Onelio Castillo Corderí, miembro del Grupo de Trabajo Permanente para la creación del Instituto comentó que el nacimiento del IICS robustece la institucionalidad de la nación ya que es un campo estratégico para el país.
“El Partido fue capaz de constituir este grupo y solicitó que se hiciera una revisión integral de la gestión comunicacional en el país. Era necesaria una mirada más científica, más articulada, más integradora de la comunicación social que dejaran esa mirada unidireccional y que incluyera a la comunicación social como un proceso estratégico para la nación”, expresó.
Para Castillo Corderí con este paso se irá trazando un camino legal que permita “acompañar el discurso político desde una plataforma jurídica como son las resoluciones, legislaciones y decretos-leyes.
“Los congresos del Partido definen a la comunicación como un eje estratégico, a la vez que el lineamiento 265 que convocan a la creación de la política de comunicación social del estado y del gobierno, realizando las transformaciones estructurales y funcionales que se requiriesen”, dijo.
La proyección del Instituto es implementar la política de comunicación existente en el país, dijo el miembro del Grupo de Trabajo Permanente.
“La Constitución de la República defiende la comunicación, la información y el conocimiento como derechos ciudadanos y como bien público de la ciudadanía”.
El Instituto tiene como misión, según el decreto-ley 41, conducir y controlar la Política de la Comunicación Social del Estado y el Gobierno cubano; proponer su perfeccionamiento, así como contribuir a fomentar la cultura del diálogo y el consenso en la sociedad cubana.
El Consejo de Ministros dispone de un plazo de 30 días para proponer y aprobar las funciones, composición y estructura en todos los niveles del nuevo organismo.
Más adelante, el directivo mencionó algunas de las tareas del IICS. Entre ellas sobresalen la dirección metodológica de la ejecución de la comunicación social en los órganos del estado, los OACES, así como los órganos locales, etc.
“Igualmente se identificó la gran dispersión de investigación en materia de comunicación que existía en el país, con una visión reduccionista. También se incluye el tema de la superación de sus profesionales. Se pautará la inclusión de contenido de comunicación social en los distintos niveles de enseñanza pues tiene que producirse un cambio cultural”, añadió.
Como otro elemento clave se encuentra la planificación de los recursos humanos y materiales que requiere la comunicación social. “No podemos permitir que se subestime la comunicación, ni que restricciones presupuestarias anulen proyectos en esta materia”.
Igualmente se pretende gestionar la marca país, así como la coordinación de las acciones de comunicación de la imagen Cuba, tanto en los ámbitos mediático, institucional y comunitario.
En busca de soluciones para problemas estructurales de la prensa
Al intervenir en la emisión de este miércoles de la Mesa Redonda, Ricardo Ronquillo Bello, Presidente de la Unión de Periodistas de Cuba (UPEC), señaló que, como en otros ámbitos de la vida cubana, la comunicación también ha estado en rectificación durante los últimos años.
Durante los últimos congresos y eventos de la UPEC, hemos sistematizado los problemas estructurales de la prensa, dijo.
Los conflictos acumulados no pueden resolverse por separado, sino desde una visión más integral e integradora. En ese contexto, “la constitución de este organismo, todo lo que le antecedió y otras decisiones que están por adoptarse en el ámbito de la comunicación tienen un alcance mayor”.
Durante la Conferencia Nacional del Partido, recordó, Raúl se refirió al vínculo entre la democracia y el periodismo y a la concepción de la crítica en el funcionamiento democrático del socialismo: son ideas fundamentales.
Con esos antecedentes, “el primer paso es reconocer las enormes deformaciones en la concepción de la comunicación en nuestro país. Algo en lo que la constitución de este organismo puede ayudar extraordinariamente”.
No obstante, alertó, los problemas no se resolverán de la noche a la mañana con la creación del instituto. Pero la estructura le dará coherencia a una política de comunicación que ha sido discutida y analizada por muchos factores de la sociedad cubana. Si no hay una estructura que la haga cumplir, que le de cuerpo, que la impulse y controle, por supuesto que será imposible.
En el ámbito del periodismo hay temas muy importantes que se recogen en la política y que el nuevo instituto tendrá que atender. “Cuando hablábamos en los Congresos de la UPEC de los problemas estructurales de la prensa, uno de los primeros a los que nos referíamos era el relacionado con la economía de los medios”.
Como señaló Rosa Miriam Elizalde durante el reciente encuentro con el presidente Díaz-Canel, la UPEC realiza un censo en todo el sistema de comunicación pública del país para listar los problemas materiales de la prensa.
“Hoy no hay un canal de diálogo del sistema de medios del país con el gobierno para discutir esos temas: no existe. El canal será ese instituto que estamos creando”, comentó Ronquillo Bello.
Otros problemas se derivan de la no existencia de ese organismo. “Por ejemplo, el Partido -que hemos dicho no pocas veces que no debe inmiscuirse en los temas de administración- tenía que asumir responsabilidades que en realidad corresponden a un organismo del Estado o el Gobierno”.
Dijo que previamente no siempre encontraron comprensión en lo relativo al cambio de modelo de gestión económica de los medios. Sin embargo, la política de comunicación reconoce que pueden tener tres formas de financiamiento: el presupuesto del Estado dado el carácter público de la comunicación, las formas presupuestadas con tratamiento especial que existen en otros ámbitos de la economía y hasta la posibilidad de llegar a constituir empresas de comunicación en el escenario de la economía cubana.
“¿Cómo conseguiremos eso sin un instituto que canalice las transformaciones en un ámbito tan importante como la sostenibilidad económica de los medios en nuestro país?·, cuestionó.
Otro tema destacado por el presidente del gremio periodístico fue la necesidad de que – como establece la Constitución de la República- se respete el derecho de los ciudadanos a la información.
“En un país que se ha tenido que construir en una trinchera, sometido a un acoso permanente, una de las cosas que nos ha pasado es que no pocas veces el silencio formó parte de la estrategia de enfrentamiento a los enemigos de la Revolución. Pero en la era de la convergencia, con un cambio dramático en los modos de funcionar la comunicación, usted no puede seguir apostando al silencio”, insistió Ronquillo Bello.
Por ello es tan importante este organismo, que se está creando también con la esencia de defender la transparencia en el ejercicio del gobierno y las instituciones públicas.
La palabra transparencia, recordó, ha tenido sus malas interpretaciones en Cuba porque recuerda a la llamada glasnost soviética y la vimos con cierta suspicacia. “Sin embargo, en los últimos años se ha ido reivindicando, convirtiéndola en una palabra de la Revolución que debe describir el tipo de funcionamiento de las instituciones públicas cubanas”.
En otro momento de su intervención, resaltó que el nuevo instituto tiene que ayudar a crear no solo una nueva cultura de la comunicación, sino una nueva concepción democrática de la comunicación en el socialismo. “Nosotros tenemos la posibilidad de construir un modelo de prensa que no se ha construido en el mundo”, dijo
En los últimos tiempos, “algunos compañeros han defendido el surgimiento de este sistema paralelo que ha ido creciendo a veces con financiamiento de los Estados Unidos en Cuba, algunas personas han idealizado el surgimiento de medios privados como solución de los problemas del periodismo en Cuba”.
Sin embargo, discutiendo con ellos, les digo que nosotros podemos hacer algo que no se ha hecho nunca en ninguna parte del mundo: construir un sistema de medios de prensa que se convierta verdaderamente en parte de los mecanismos de control social y popular, apuntó.
Ahora tenemos que favorecer que la prensa forme parte de los mecanismos de control social y popular. Ese tiene que ser uno de los horizontes principales del nuevo instituto”.
Por tanto, resumió, es una buena noticia, es la respuesta a una demanda de varios eventos y congresos de la UPEC: la aparición del instituto contribuirá a seguir resolviendo los problemas estructurales de la prensa en el país.
¿Cuáles son los próximos pasos?
“El Decreto Ley que establece la creación del nuevo instituto y la extinción del ICRT no presupone de modo alguno la laceración del funcionamiento y la estabilidad del desarrollo de la radio y la televisión en Cuba”, destacó más adelante Onelio Castillo Corderí.
Explicó que son dos potentísimos sistemas de comunicación: parte indisoluble de la vida del país y de ese liderazgo informativo de creación de consenso, de difusión de contenidos culturales y entretenimiento tan necesarios en cualquier escenario.
La dirección general de la radio aglutina el quehacer de cien emisoras y la dirección nacional de la televisión cohesiona el trabajo de 42 canales diseminados por toda Cuba, detalló.
“De esos 42 canales, más del 50% son territoriales. Mientras, para que se tenga una idea del desempeño de la radio, 74 emisoras tienen carácter local, están más cerca de la vida de la gente, con una misión de muchísimo privilegio en ese trabajo de rendición de cuenta, de control popular y participación que a veces no logramos en los grandes medios nacionales”.
En cualquier caso, apuntó, la creación del nuevo organismo será un espaldarazo para el funcionamiento de la radio y la televisión, para que sigan creciendo cualitativamente como medios con una altísima responsabilidad en la comunicación social del país.
El instituto no incluye únicamente los contenidos de corte informativo. “El nombre de Instituto de Información y Comunicación Social puede dar a entender que es exclusivo a este tipo de contenidos. No es así, son los contenidos de todo tipo que se comunican a través de un medio e incluyen a sus hacedores”.
Añadió que la radio y la televisión no solamente son comunicación social, también son arte e industria cultural. “Todos los contenidos tienen esa manera de cohesionar que convierten a la radio y la televisión en grandes medios de comunicación. Están en la primera línea cuando se habla de este instituto”.
Además, implica una visión de integración superior. “El ICRT solamente atendía a la radio y la televisión, pero no a toda la prensa del país y a la comunicación mediática”.
En otro momento de su intervención, Castillo Corderí explicó que ahora comienza un proceso durante el cual el ICRT se irá extinguiendo a partir de los procedimientos y disposiciones legales que el país tiene establecidos en estos casos.
“No es la primera vez que un organismo de la administración central del Estado se extingue en Cuba, hay una plataforma de qué hacer en esos casos, cómo se desarrolla todo el proceso. Implica incluso acciones de índole económica, cancelaciones de cuentas, manejo y traspaso de recursos”.
La decisión de crear el nuevo instituto, insistió, “es una clara expresión de la voluntad política de fortalecer nuestra democracia a partir de un mayor nivel de participación del pueblo en la construcción de nuestro modelo económico y social, en la construcción del destino para el país que hemos escogido y al apuntalamiento de ese concepto constitucional de que Cuba es un estado socialista de derecho”.
El instituto y las normas que le sucederán van a cobijar, desde un marco regulatorio mucho más eficaz, todo el trabajo de la radio y la televisión en el país. “El marco legal que se aprobará como parte del proceso legislativo tiene como fecha tope el próximo año. Está previsto un decreto ley sobre la comunicación social y normas complementarias que tendrán rangos de decretos o resoluciones dictadas por el propio instituto”.
No creo que nadie piense que este instituto y el marco legal asociado resuelvan por si solos todos los problemas, dijo. “Porque la transformación estructural no siempre significa transformación cualitativa en el orden cultural y eso tiene que generarlo todo el sistema de comunicación en el país y toda la sociedad que participa en estos procesos”.
No obstante, si Cuba dispone de un sistema de comunicación mejor articulado, más coherente y eficaz, potencia la credibilidad del sistema político y se fertiliza el capital simbólico de la nación.
“Se trata de que cada compatriota en el pedacito de Cuba que defiende también le ponga el corazón a la Patria desde la comunicación”, concluyó.
Proteger la vida de las gestantes, madres que lactan y adultos mayores es prioridad para el sistema de salud en Cuba. La vacuna de la esperanza continúa su paso por Jobabo con la aplicación de la segunda dosis de Abdala a embarazadas y puérperas, además de concluir con éxito el esquema de vacunación a los 38 abuelos sin amparo familiar que se asisten en el Hogar de ancianos, grupos de riesgo ante la COVID-19.
Desde sus inicios el pasado 22 de julio con la primera dosis a los abuelos, se garantiza que el proceso tenga la calidad que se exige en el sistema sanitario del país, no se reportaron reacciones adversas, algo que resulta positivo teniendo en cuenta que se trata de personas vulnerables.
Todas estas personas desvistieron sus hombros depositando su esperanza en Abdala, ahora se sienten más seguros y protegidos, aunque las defensas contra el virus SAR-CoV-2 se logran después de 28 días de la vacunación. Ahora solo queda mantener los protocolos de bioseguridad establecidos para ganarle la batalla a la pandemia.
Traslado de Abdala hacia Hogar Materno y de Ancianos por el personal de salud y el apoyo de cocheros cuentapropistasEl personal de salud encargados del proceso de la vacuna ofrecen charla a los abuelos acerca los beneficios de Abdala para incrementar las defensas del organismo contra la pandemiaMomentos antes de suministrar el inmunógeno se chequean los signos vitales y enfermedades de base
Actualización del carnet de vacunación por la doctora, un documento esencialEnfermeras del Hogar de ancianos en el registro de cada sujeto vacunado su historia clínicaJeringuilla cargada de la vacuna para iniciar el proceso de vacunación a los abuelos sin amparo familiarPinchazo en el hombro de abuelo con mucha seguridad y esperanzaAbuelos del Hogar de anciano durante la observación luego de suministrada la vacuna
Consulta previa a la vacuna en la que se le realiza la encuesta a gestanteControl de la presión arterial y signos vitales a embarazadas ingresadas en el Hospital y hogar materno para la inoculaciónPinchazos en los hombros de las gestantes y puérperas, que muestran seguridad en esta dosis
Ochenta y nueve pacientes de Jobabo fueron diagnosticados con COVID-19, informó hoy miércoles el Doctor Francisco Durán en su habitual conferencia matutina de prensa, para un acumulado de 600 casos al municipio en el año en curso, 595 autóctonos, y cinco provenientes del exterior.
La Licenciada en Higiene y Epidemiología en la localidad, Yanetcy Díaz Tejeda, informó que de los nuevos diagnósticos trece residen en el reparto Manuel Ascunce (Los Solares), once del pueblo, diecisiete de Viet Nam, cuatro del Batey l y seis del Batey ll.
De Argentina Norte y Sur doce pacientes, seis de cada uno. De las 40, el 5, el 6 y el médico doce pacientes, tres de cada reparto. En el Azucarero reside un paciente, dos en el 12, uno de los Sitios y uno de Las Tecas.
En la comunidad rural del Grillo residen cuatro pacientes, en Martinillo uno, en Pozo Salado dos, uno de San José y uno de Las Margarita Carretera. En el control de los focos han declarado hasta el momento a 334 contactos ya aislados para el estudio y seguimiento adecuado. Precisó la especialista.
La que añadió que se mantienen 226 pacientes activos, veintiséis del Pueblo, treinta de Los Solares, catorce Batey 2, siete Batey l, tres de los sitios, diecinueve de Argentina Sur, catorce de Argentina Norte, cinco del Seis, uno de nuevo 6, treinta y cuatro de Viet Nam, cuatro de Pozo Salado, seis del reparto azucarero, cuatro del médico, ocho de Margarita carretera, uno de Ojo de Agua, dos de Las pelonas, dos de Sirven, cuatro del 55, dos de Las Tablas, tres del nueve, uno de la Porta del Moro, uno de Zabalo, uno de Bracito, uno de Mejía, uno de Las Lajitas, uno de las Jocumas, uno de Ciruelito, cinco del 5, uno Limón Dulce, dos de Resbalón, dos del Níspero, uno del Aguacate, tres de las 40, uno san José, uno del 12 y uno de Las Tecas.
Además de 96 personas en observancia en centros de aislamientos, 58 en el politécnico Manifiesto de Montecristi del municipio y 38 en la escuela especial 13 de marzo, estos últimos, catalogados positivos de mediana complejidad, con una evolución estable de la enfermedad.
En el Hospital 14 de junio se asisten a 52 pacientes, 19 en la sala B, para casos confirmados de alta complejidad, 31 en la sala A, sospechosos y 2 en terapia intensiva.
Diaz Tejeda insiste a los jobabenses a no alarmarse ante tal escenario, solo extremar las medidas de bioseguridad y sobre todo a la disciplina y responsabilidad individual por la salud de todos.
Las Tunas.- Un servicio a domicilio de productos agropecuarios para clientes de la ciudad de Las Tunas, recién estrenó el mercado de nuevo tipo Leningrado que desde hace poco tiempo funciona como tal en el reparto Buena Vista de la ciudad capital.
Esta es una de las opciones en respuesta a las exigencias de muy poca movilidad de personas que hoy tiene la mayor urbe de la provincia para contener la propagación del virus del SARS-CoV 2, explicó Carlos Daniel Guerrero Peña, responsable de la iniciativa denominada eltunerito.com.
Informó que hasta hace poco la propuesta era solo para personas jurídicas y ya se extiende hasta las naturales ahora con oferta de un combo de mil 100 pesos conformado por 15 libras de plátano vianda, ocho de burro, igual de calabaza, cinco de malanga, cuatro de garbanzo, media de ajo, un litro de vinagre y un paquete mixto de condimento.
Zoila Serrano, vecina de la calle Joaquín Agüero en el centro de la ciudad de Las Tunas, una de las primeras beneficiadas, expresó a Tiempo21 estar muy satisfecha, no solo por la calidad de los alimentos sino también por la prontitud y el excelente trato con que la atendieron.
El impulsor de la idea refirió que sin costo añadido por la entrega a domicilio en ninguna de las opciones, en estos momentos también entregan otro módulo al precio de 600 pesos que contiene 10 libras de plátano, cuatro de malanga, dos de garbanzo, media de ajo, un litro de vinagre y un paquete de condimento.
“También tenemos una oferta con los productos que el cliente solicite a la carta y cuyo precio debe estar entre los 600 y mil 100 pesos”.
Guerrero Peña también comentó que más adelante pretenden incorporar productos cárnicos ahumados y embutidos y que el pago de los módulos también se puede hacer por transferencia a tarjeta magnética.
El servicio de entrega a domicilio de productos agropecuarios se presta de 7:00 de la mañana a 9:00 de la noche, se puede solicitar por los teléfonos 31 34 90 92 o por vía Whatsapp o llamando con *99 al móvil 58 86 53 47.