Al concluir una nueva semana de enfrentamiento a la COVID-19 en el país, en la cual se manifestó como tendencia la disminución de casos autóctonos en un 33.4% y el aumento de los importados en 75%, el presidente de la República, Miguel Díaz-Canel Bermúdez, insistió en la necesidad de que cuando llegan viajeros a un hogar se exija con todo rigor a las personas que mantengan un aislamiento físico en la vivienda, que se use el nasobuco y se adopten las medidas higiénicas establecidas.
No puede haber fiesta, como tampoco se pueden hacer ni recibir visitas hasta que se confirme que el segundo PCR también fue negativo; tampoco pueden ir al trabajo o a la escuela los integrantes de familias donde se reciban viajeros, subrayó el jefe de Estado al presidir en la tarde de este martes, junto al primer ministro, Manuel Marrero Cruz, el primer encuentro de la semana del grupo temporal de trabajo para la prevención y control del nuevo coronavirus.
Donde exista una violación, hay que hacer la denuncia y aplicar la multa correspondiente por propagación de epidemia e incumplimiento de las medidas, enfatizó el mandatario, porque este es un asunto de todos.
Tiene que haber un control estricto por parte del médico de la familia de las personas que están llegando al país, dijo, y deben hacerse visitas sorpresivas para ver si cumplen con las medidas, porque de la responsabilidad familiar depende que no se nos complique el nuevo escenario.
Según dio cuenta durante el intercambio el ministro de Salud Pública, José Angel Portal Miranda, de los 677 casos autóctonos que se han diagnosticado en lo que ha transcurrido de noviembre, 101 (14.9%) tienen como fuente de infección algún viajero.
En provincias como Matanzas, Cienfuegos, Las Tunas y Holguín, señaló, todas las personas que se han confirmado han estado vinculadas a casos importados. En otras como en Camagüey es el 90%, en Villa Clara el 83%, en La Habana el 75% y en Santiago de Cuba el 68%.
La tendencia del presente mes, precisó, continúa siendo al incremento de los casos importados en el territorio nacional: 234 eran, hasta el 21 de noviembre, los viajeros que habían resultado positivos a la COVID-19.
Por otra parte, refirió que los mayores niveles de transmisión de la enfermedad en noviembre se manifiestan en Pinar del Río, Ciego de Ávila, La Habana y Santiago de Cuba, donde se concentra el 98.5% de los casos autóctonos hasta el momento.
De las provincias cubanas, comentó el ministro de Salud Pública, sigue siendo Pinar del Río donde se confirma la mayor cantidad de casos autóctonos en los últimos 15 días, aunque en ese periodo la tendencia es a la disminución en la tasa de incidencia por cada 100 000 habitantes.
Si bien es allí donde se evidencia la situación epidemiológica más compleja del país, con el diagnóstico de casos en cinco de sus municipios durante los últimos siete días, Portal Miranda aseguró que la pasada semana es la tercera en que de manera consecutiva disminuyen los pacientes diagnosticados con la enfermedad.
Al respecto, el gobernador Rubén Ramos Moreno informó que las mayores complejidades están en el municipio cabecera y en Sandino, con 27 y tres controles de focos activos, respectivamente.
Teniendo en cuenta que entre el 15 y el 23 de noviembre la provincia ha recibido 872 viajeros, se aplican medidas de refuerzo con el objetivo de mantener un control estricto a cada uno de ellos. En estos momentos se encuentran en proceso judicial un viajero y su familia, en el municipio de Sandino, por incurrir en violaciones de los protocolos establecidos.
Acerca del cumplimiento de las medidas de seguimiento y control epidemiológico a quienes ingresan al territorio nacional, que no en todas las provincias se ha tratado de igual manera, el primer ministro llamó a revisar el protocolo establecido y cómo se está implementado. “El proceder tiene que ser el mismo en todos los lugares”, enfatizó.
Las personas están saliendo de noche de las casas, recibiendo visitas, subrayó, y tenemos que ver cómo cerramos de verdad, que quien no cumpla con lo establecido sepa que tiene que pagar una penalidad. Esto tenemos que hacerlo con mucha energía, recalcó.
Por otra parte, ante el incremento del arribo de viajeros, causa fundamental que disparó los contagios en la provincia de Santiago de Cuba durante las últimas semanas, el vicegobernador Manuel Falcón Hernández explicó al grupo temporal que se continúan reforzando las medidas de control en frontera y en los hogares.
Nos hemos propuesto, afirmó, revisar en detalle todos los viajeros, con un seguimiento hasta los hogares buscando que se mantenga el cumplimiento de lo establecido y que no exista confianza, pues la mayoría de los casos importados que han resultado positivos han sido confirmados en el PCR del quinto día.
Al cierre de la pasada semana, la número 37 desde que se inició la epidemia en el país, en este oriental territorio se habían confirmado 33 personas con la COVID-19, explicó el ministro de Salud Pública. Allí se encuentran activos un evento de transmisión local y 26 controles de focos que acumulaban 35 casos positivos en los municipios de Songo la Maya, Santiago de Cuba, Palma Soriano, San Luis y Contramaestre.
De manera particular sobre La Habana, donde se mantiene un bajo nivel de transmisión de la enfermedad, Portal Miranda comentó que al cierre de la última semana se manifestó un incremento de los casos.
Al desglosar dicho comportamiento, refirió que en ese periodo de análisis aumentaron en 26 los casos importados, en tanto los autóctonos disminuyeron de 20 que se diagnosticaron en la semana anterior a solo nueve. “La fuente de infección de los casos autóctonos que presenta actualmente el territorio la constituyen los casos importados”, aseveró.
Al respecto, el gobernador Reinaldo García Zapata refirió que los 32 controles de focos con medidas de refuerzo que están activos en la capital están relacionados con viajeros, de ahí el estricto control que se realiza a estas personas para conocer con precisión cuándo llegan, a qué municipio y área de salud pertenecen y otros elementos vitales para darles un mejor seguimiento.
Lo que hemos establecido, aseguró, es que en el transcurso de las primeras 24 horas de su arribo al país, los viajeros tienen que ser visitados por el médico de la familia. Según García Zapata, al cierre de la reunión en la capital se encontraban bajo seguimiento 4 611 viajeros.
Tras una nueva semana de enfrentamiento a la COVID-19 en la que, con excepción del municipio especial Isla de la Juventud, se diagnosticaron pacientes en todos los territorios del país, los mayores aportes a la incidencia de la enfermedad se concentran en las provincias de Pinar del Río, La Habana, Santiago de Cuba y Ciego de Ávila, esta última con una situación estable en el control de la transmisión.
El actual escenario epidemiológico que vive Cuba sigue exigiendo una mayor responsabilidad familiar e individual en todos los ámbitos.
Unido a ello, resulta vital el estricto cumplimiento de los protocolos sanitarios establecidos, donde resulta clave el trabajo que se realice desde las áreas de atención primaria de salud para continuar previniendo la transmisión de la COVID-19 en Cuba.