¿Cuánto tiempo me queda por vivir? ¿A partir de ahora tendré una vida normal? ¿Me curaré? Estas son algunas interrogantes que tienen los pacientes que se enfrentan al cáncer, a las cuales los médicos dudan en dar una respuesta definitiva.
En el 2007, sin embargo, gracias a los enormes avances en los tratamientos, la respuesta a todas ellas es, las cosas marchan bien. Así lo expresó Pedro Narciso Rodríguez Coba de Jobabo, Las Tunas, 83 años de edad, quien tuvo cáncer de Colon y lleva 15 años intervenido quirúrgicamente.
Se benefició de los exámenes de detección, pero también fue victima de sus duras consecuencias. «Comencé con un fuerte dolor en el estómago, dijo Pedro, acudí al Hospital, me medicaron, alivió el dolor, pero se repitió posteriormente».
«Mi familia se comenzó a preocupar y me llevaron al Hospital provincial, Guevara, me realizaron un estudio más profundo el cual resultó que tenía problemas en el Colon». «El médico me orientó que no me debía operar, indicó una dieta donde no podía consumir el tomate por la semilla, la guayaba, la yuca por el almidón entre otros alimentos para no agravar la enfermedad y no recurrir a la operación».
Inspirado en su experiencia, nos cuenta «Al paso de los días seguí sintiéndome mal, mi sobrino me sugirió que me operara que quizás más tarde podría tener consecuencias mayores, y decidí operarme».
Miedo, preocupación, tristeza, sintió Pedro al ser intervenido quirúrgicamente, «me sentí muy triste por haberme hecho la Colostomía, pero decidí seguir luchando con eso que tenía en mi camino, estaba deprimido, pensé que podría ser el final de mi vida, pero seguí luchando, gracias a la medicina cubana que me dio vida para seguir adelante» expresó, mientras corría una lagrima por sus mejillas.
«Hoy estoy feliz, junto a mi familia, hijos y sobre todo por estar vivo», refirió Pedro, el que aconsejó a otras personas en igualdad o peores condiciones relacionadas con el cáncer, «hay que seguir luchando con ella, la vida no termina ahí, siempre pensando que se debe seguir viviendo».
Si ese cáncer hubiera evolucionado de manera natural, es probable que le causara la muerte a Pedro, quien progresa satisfactoriamente debido a la detección temprana, con un tratamiento intensivo, que le ha permitido vivir, renovar la energía y encontrar su propia manera de luchar contra la enfermedad.