La elevada tasa de embarazos en la adolescencia constituye un verdadero desafío de la salud sexual y reproductiva en Jobabo.
El embarazo en la adolescencia es una de las consecuencias del desconocimiento de salud sexual en esta etapa de la vida. La importancia de esto radica en que repercute negativamente sobre la salud de la madre y su hijo. Estos riesgos son mayores, en especial cuando las condiciones sociales y económicas hacen que el cuidado de la salud sea inferior a lo ideal, lo que es determinante en el desarrollo psicosocial.
Los cambios físicos ya no son los característicos de la adolescencia para muchas de las que llegan a esa etapa de la vida. Sus cuerpos aún no están maduros para un proceso que provoca tantas transformaciones en el organismo, sin embrago a esa corta edad, las acompaña una barriga en crecimiento, náuseas y malestares esas exclusividades que indican la llegada de un nuevo ser.
También las más jóvenes embarazadas se exponen a la prematuridad de sus bebés, a complicaciones obstétricas como la hipertensión arterial y la no contracción del útero, que puede desencadenar hemorragias en muchos casos. A ello podemos sumar otras consecuencias a las que se refiere el psicólogo Alexis Aguilera Prieto.
Un eslabón esencial en el cuidado de las embarazadas en Jobabo y muy especial de aquellas adolescentes que pasan por ese proceso, lo constituyen el hogar materno. Institución responsable por el cuidado y la observación especializada a las embarazadas consideradas de alto riesgo, mediante la efectiva implementación de la genética médica, como garantía de la atención médica integral a la madre y su bebé. Acerca de su atención la adolescente del municipio Dayani Claudia Milanés Luis nos comenta.
Sus historias se hacen más cotidianas en los últimos tiempos y los estudios indican que la maternidad precoz se ha extendido no solo en el mundo, sino también en Cuba.