Con un seminario dirigido a dirigentes sindicales y directivos de entidades locales, comenzó en Jobabo la fase preparatoria para la consulta del anteproyecto del Código de Trabajo, legislación busca incorporar elementos clave en materia de protección laboral, derechos, deberes y requisitos, adaptándose a los nuevos socioeconómicos del país.
El encuentro impartido por Dagmara Núñez Sánchez, miembro del secretariado provincial de la CTC y presidenta de la comisión a cargo de la consulta, junto a Roberto Cruz Tamayo, director del Instituto Provincial de Estudios Laborales, expuso que el programa preparatorio abarca todas las estructuras sindicales y administrativas para asegurar una consulta efectiva, que incluirá al 100% de los trabajadores de todos los sectores, sean afiliados o no.
El cronograma consta de cinco etapas: la primera, desarrollada en enero de 2025, centrada en la organización; la segunda, entre julio y agosto, dedicada a la preparación mediante capacitaciones y seminarios; la tercera, de septiembre a noviembre, con las reuniones de consulta; la cuarta, de octubre a enero de 2026, para el procesamiento de propuestas; y la quinta, enfocada en las acciones legislativas, el próximo calendario.
Entre enero y mayo de este año, se realizó una consulta especializada a más de 15 organismos, se diseñó la metodología para el proceso y se elaboraron materiales informativos, como un tabloide con datos esenciales.
Además, el anteproyecto fue evaluado por el Secretariado del Comité Central del PCC y el Buró Político, se definió una estrategia de comunicación y se socializó con secretarios generales de sindicatos nacionales y provinciales.
Aclararon que a partir del 23 de junio y hasta el 30 de agosto, se llevarán a cabo seminarios en los colectivos laborales para profundizar en los contenidos del anteproyecto. Estas sesiones buscan preparar a los participantes para los debates posteriores, donde podrán aportar sus criterios y enriquecer la futura legislación.
Las autoridades destacaron la importancia de esta consulta, que permitirá a los trabajadores cubanos participar activamente en la construcción de una normativa laboral más justa y adaptada a los nuevos tiempos. El proceso busca recoger las opiniones de todos los sectores para lograr un Código de Trabajo inclusivo y representativo.